jueves, 13 de mayo de 2010

EL GOBIERNO GASTA POCO Y MAL: GUILLERMO ORTIZ

Cristina Valenzuela / El Sol de Toluca
El exgobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz Martínez, sentenció que el Gobierno gasta poco y mal y esto sigue siendo cierto, al participar en el panel "Financiamiento y Desarrollo Sustentable" en el marco de los trabajos del Segundo Foro de Reflexión Compromiso por México "Economía y Desarrollo", que tiene lugar en el Centro Cultural Mexiquense.
Expresó que una de las enormes prioridades para este país es resolver de una vez por todas el tema fiscal, lo cual no es tan difícil, pues México gasta alrededor del 21 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) incluyendo el gasto de paraestatales, mientras que Brasil el 40 por ciento, entonces los recursos que absorbe el sector público son menores en México que en Brasil.
Por otra parte, ante los malos resultados que ha arrojado la paraestatal Pemex, advirtió que es necesario mejorar enormemente la calidad de la administración y la determinación del Gobierno por llevarlo a cabo. En el tema de Pemex las cosas están muy mal y los sucesivos gobiernos en lugar de arreglarlas las van desarreglando, sentencio Ortiz Martínez.
Cuando fui subsecretario de Hacienda, consideró Ortiz Martínez, "las cosas se manejaban mal pero bastante menos mal que ahora" y estoy hablando, aclaró, de cuestiones técnicas. En Petrobras, dijo, vivieron en ese tiempo a aprender de nosotros, pero a aprender cómo no hacer las cosas, porque hoy en día Brasil es un exportador neto que ha hecho descubrimientos importantísimos de yacimientos nuevos, porque se le ha dado a Petrobras la flexibilidad de aprovechar las tecnologías existentes en el mundo, a través de asociaciones y de transferencia de tecnología.
En el marco de este foro, al que asistió el gobernador Enrique Pena Nieto, el exgobernador del Banco de México añadió que en el tema de energía tenemos un grave problema en el país", pues hace seis años estábamos produciendo 3.3 millones de barriles diarios de petróleo y hoy apenas 2.6.
El petróleo fácil, advirtió, se agotó y estamos compensando la declinación de los campos más importantes con nuevos descubrimientos que no alcanzan a resarcir totalmente lo que estamos perdiendo.
Opinó que si no resolvemos el tema energético, primero lo relacionado con el petróleo pero al mismo tiempo se atacan los otros temas de energías alternativas, "vamos a encajonarnos, a ir hacia un callejón sin salida".
Mencionó que con lo que acaba de ocurrir en Louisiana, con la exploración en aguas profundas que estaba haciendo la British Petroleum, se antoja que va a ser complicado que empecemos nosotros a hacer exploración masiva en aguas profundas en el Golfo de México, porque, además, ni siquiera tenemos la tecnología para hacerlo.
Tenemos que reordenar la industria energética y dedicar recursos suficientes para buscar fuentes alternativas, en ese sentido hay un enorme potencial en materia de energía solar, eólica, etc, destacó el panelista.
Expresó que el otro tema es la educación, pues México es uno de los países que más gasta en este rubro entre los de la OCDE, con el equivalente al 6.8 por ciento del PIB, el doble que en Brasil, una tercera parte más que Argentina, más que Francia, Inglaterra y Alemania pero más del 90 por ciento del gasto se va a sueldos y salarios.
Esto nos lleva a una situación insostenible porque los resultados son muy malos, México siempre hasta el fondo en los exámenes internacionales, a pesar del enorme gasto, además, estamos en último lugar en desarrollo y tecnología, apuntó.
Destacó que todos estamos conscientes del bajo crecimiento que ha tenido el país durante mucho tiempo y de la potencialidad que tenemos para cambiar las circunstancias.
En el año 60, hace 50 años, subrayó Ortiz Martínez, México tenía un ingreso per cápita, ajustado por paridad de poder de compra, no muy distinto al de España, un poco más bajo que el de Irlanda, más del doble del de Corea y tres veces más que el de Singapur.
En los últimos años incluso el resto de América Latina ha tenido un desempeño mucho más vigoroso por otras razones que el de México.
Una de las razones importantes de eso, según explicó, ha sido la serie de crisis económicas por las que ha pasado el país "que nos han echado para atrás durante muchos años". En los 80 el crecimiento fue cero, una década perdida.
La razón inmediata para el panelista, es que ahorramos poco e invertimos poco en relación con otros países. El ahorro en estos 50 años promedio en México, la inversión con altas y bajas porque hemos tenido un déficit en cuenta corriente en promedio en esos 50 años de alrededor del dos por ciento del PIB, que no es muy grande, ha sido de alrededor del 21 por ciento de ahorro y 23 por ciento la inversión, cuando en España el promedio es 27 por ciento, en el sureste de Asia de 30 por ciento.
Explicó que tanto el ahorro como la inversión no son factores exógenos, son factores que se van generando con las oportunidades productivas de la economía y se van modificando tanto los hábitos de ahorro como los de inversión.
Otra razón es el uso improductivo de los recursos dijo y precisó que hay sectores de la economía que tienen muy baja productividad, el campo por ejemplo, que representa el 27 por ciento del PIB, pero contribuye con menos del cinco por ciento del producto lo que significa que la productividad de quienes están dedicados a actividades agropecuarias es apenas la tercera parte del promedio nacional.
Los municipios recaudan apenas 0.6 por ciento de los ingresos mientras que el promedio de la OCDE es de más de cinco por ciento, lo que es una muestra del problema estructural gigantesco que se ha arrastrado por décadas, que es el tema fiscal.
Por ello expresó que una de las enormes prioridades para este país es resolver de una vez por todas el tema fiscal, lo cual no es tan difícil, pues México gasta alrededor del 21 por ciento del PIB incluyendo el gasto de paraestatales, mientras que Brasil el 40 por ciento, entonces los recursos que absorbe el sector público son menores en México que en Brasil.
El Gobierno entonces gasta poco y mal, esto sigue siendo cierto, apuntó en su intervención.
Sostuvo que la crisis de Grecia nos ha enseñado la interdependencia brutal entre los sistemas financieros y las economías en el mundo.
Grecia representa el dos por ciento de la Eurozona pero ha puesto a temblar al mundo, esta interdependencia global entre países y sistemas financieros da lugar a un nuevo gran campo de los bancos centrales que es vigilar la estabilidad del sistema en su conjunto, concluyó.

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